Este artículo presenta los principales hallazgos de la experiencia de observación de un proceso sin precedentes en la historia político-electoral costarricense, por medio del cual la ciudadanía de Río Cuarto contó con la posibilidad de escoger el centro político y administrativo de su cantón y en el que el equipo del Centro Agenda Joven de la UNED participó como testigo de excepción. Mediante un enfoque de complementariedad metodológica, se determinó que la mayoría de las personas jóvenes electoras perciben la política con compromiso, entusiasmo e incluso pasión al relegar la indiferencia y el disgusto hacia actividades electorales. Este sector poblacional utiliza sus derechos políticos, tanto en aspectos logísticos, como de coordinación y fiscalización. Asimismo, la investigación registró diversas manifestaciones acerca de la responsabilidad que debían asumir las personas jóvenes en un momento histórico como este, en el que iniciaban el camino hacia la construcción de una identidad cantonal, quienes encontraron en los medios electrónicos y las redes sociales, herramientas de gran valía para asumir cuotas de responsabilidad y liderazgo en diversas actividades del proceso.